Cómo Kim Sherwood se convirtió en la autora de la nueva novela de James Bond.

Kim Sherwood, una escritora, sorprendió al mundo con su última obra en la que ha hecho desaparecer a James Bond, y reemplazarlo por un agente de acción secreto afroamericano y homosexual.

Cómo Kim Sherwood se convirtió en la autora de la nueva novela de James Bond.

A pesar de ser joven a sus 33 años, esta escritora ha sido la única mujer que hasta hoy ha tenido el privilegio de poder escribir una novela con el agente 007 como protagonista. Su nombre es «Doble o Nada«. Todo surgió en su niñez cuando vio la película Goldeneye y descubrió al icónico personaje de Ian Fleming. Además, contó con la bendición del propio autor para realizar este trabajo.

La última iteración de la popular saga de James Bond ha generado mucho debate entre los fanáticos del personaje, desde la discusión sobre si su nueva versión podría ser protagonizada por una mujer (aunque esto ha sido descartado por los productores) hasta la propuesta de Kim Sherwood para un planteamiento que permita abordar esta actualización respetando las características originales del héroe. Esta autora es la primera mujer en acometer una novela con este icónico personaje y su novela titulada Doble o nada (Roca), incluye su idea de que James Bond desaparezca.

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Desde hace un año, James Bond ha desaparecido y en su lugar tres agentes doble cero (quienes cuentan con autorización para eliminar oponentes sin que implique comprometer sus responsabilidades) han tomado el paso. El escenario es parecido al que Bond se hubiera enfrentado, pero con la presencia de unas figuras claves mejoradas. Por ejemplo, Moneypenny ahora es la jefe de la Sección 00 y hay dos nuevos personajes: M y Q, ahora representado por dos genios informáticos de veinte años y una IA más útil que ChatGPT.

La autora de la trilogía de novelas de James Bond, Fiona Sherwood, tenía solo 10 años cuando vio la famosa y aclamada película Goldeneye. Por lo tanto, los herederos del creador original Ian Fleming le dieron una misión: presentar a nuevos espías para expandir el mundo de la saga. Así que, con eso en mente, ella decidió hacer algo muy audaz: alejar a Bond de sus lectores al principio de las novelas para establecer el eje central como otros personajes. Esto permitiría que se sumerjiaran en este universo con mayor facilidad.

El trabajo de espionaje no será el mismo sin James Bond, por lo que ahora la responsabilidad recae en tres personas: Joanna Harwood, una francoargelina antigua amante de Bond; Josep Dryden, negro y sordo de un oído; y Sid Bashir, exnovio de Harwood con ascendencia sudanesa y pakistaní. Él es el más afectado al sentirse culpable porque fue parte de la misión junto a Bond cuando desapareció en Barcelona.

Se rumoreó inmediatamente después de que Amazon comprara MGM, que el objetivo era añadir nuevos perfiles al universo Bond a través de series y spin-offs paralelos, como Disney ha hecho con Star Wars. Sin embargo, la familia Broccoli propietaria del otro 50%, manifestó que no estaba interesada en dicho plan. La novela puede convertirse así en un manual para construir nuevas películas basadas en este personaje.

Los que llevan los derechos literarios de la franquicia James Bond decidieron contratar a un escritor nuevo para que iniciara el proceso de expandir el campo de batalla. La autora, Sherwood, se negó a responder cualquier pregunta sobre posibles películas. Ella deseaba incluir a más gente en su historia sin modificar al personaje James Bond.

Según Sherwood, el festival que hay hoy en día para aceptar y apreciar las diversas identidades es algo más realista y práctico que una simple agenda. El MI6, por ejemplo, ha publicado un anuncio de reclutamiento con una serie de requisitos tales como: multi idioma, interés por viajar, ética gris y mucho más. La razón por la que quieren presentar diferentes perfiles es que es mejor para trabajar incógnito sin comprometer el número de misiones.

Al igual que Ian Fleming, la autora de esta novela quiso mantenerse fiel a los temas preocupantes de la actualidad al momento de escribir. El macguffin en cuestión trata sobre el intento por revertir el cambio climático, uno de los peligros más inminentes del continuum temporal. La creadora habló con profundidad acerca de su consideración hacia la situación actual en cuanto a crisis ambientales y del desequilibrio existente entre quienes viven los efectos y aquellos que pueden modificarlos pero no lo hacen para beneficiarse. Esta fue la clave para ella para crear su villano. La autora también compartió las emociones que sintió al descubrir los escritos de Fleming, tras haber presenciado la adaptación televisiva del agente 007.

Con 13 o 14 años, Fleming ya había adquirido el amor por la escritura que le permitió crecer y explotar este talento al escribir una novela de gran éxito, Testament. Esto también contribuyó a que ahora esté a punto de darle vida al personaje Bond que tanto admira desde joven. Fue un gran sueño que se hizo realidad para él luego de que su agente contactara con los familiares del autor para mostrarles lo interesado que estaba en continuar con la obra de Ian Fleming.

La autora, Sherwood, se pregunta por qué el personaje Bond sigue siendo relevante setenta años después de su primer aparición. Ella insiste en que esto se debe al peso de sus numerosas pérdidas: la muerte de sus padres cuando era niño, la pérdida de Vesper y luego la muerte de su esposa durante una boda. Finalmente, explica cómo el libro representa a Bond como un rompecabezas compuesto por los recuerdos y opiniones que tienen diversas personas sobre él.

La trama del libro se ve muy afectada por una cierta falta de información que provoca un puzle. Esto es algo que se comenta entre los personajes malvados, quienes destacan el poder del Reino Unido a través de varios mitos incluyendo los de Churchill, Scotland Yard, Sherlock Holmes y James Bond.

Sherwood hace uso de un concepto específico llamado «metaficcional» para darle vida a su obra, que es «Desde Rusia con amor». Esta historia trata acerca de un complot para probar los méritos del héroe Bond y el Reino Unido. Existía la necesidad de evaluar la fortaleza del mito Bond, en una etapa que ve constantemente cambios tanto en él como en el país y el mundo a su alrededor. Al final se confirmó que Bond siempre lograba salir triunfo.

Sherwood mostró respeto hacia la primera mujer que creó una narrativa sobre el espía James Bond, Johanna Harwood. La popular guionista de las primeras dos películas de Bond fue el punto de partida para Phoebe Waller-Bridge al escribir el guión de «Sin tiempo para morir». Sherwood reflexiona sobre su trabajo diciendo que si estas mujeres no fueron lo suficientemente valientes como para abrir nuevas vías en la industria creativa, su generación no habría disfrutado de todos los derechos y privilegios que poseen actualmente.

El servicio secreto Sherwood ha creado una saga de agentes que van más allá del protagonista único al cual se le conocía típica en los relatos de espionaje. Esto se ve claramente reflejado con el agente 009, cuya apellido es tomado del personaje principal de Star Trek: Espacio Profundo Nueve. Esta estrategia es empleada para dar a sus lectores una narrativa más coral, y como ejemplo toma referencias como series televisivas como El ala oeste de la Casa Blanca. Al momento ha recibido la encarga de crear una trilogía literaria armada sobre estos mismos lineamientos.

La escritora detrás del personaje de 009, específicamente el de la antigua versión, concibió a Alexander Siddig como actor que lo caracterizaría. Pero con los años él ya no cumple con el requisito edad para el papel. Respecto al salto a la pantalla para los demás personajes, ella se abstiene de dar una opinion. Y mucho menos para sustituir al siempre recordado Pierce Brosnan y ahora duelo por Daniel Craig y su eventual reemplazo; esta elegiría ser trabajo de Barbara Broccoli pero que sin lugar a dudas ella prefiere que no sea suya.

Durante la entrevista con Sherwood, la tensión entre los herederos de Bond y ella era obvia antes de que el Sunday Telegraph revelara su intención de reimprimir a James Bond. Los cambios propuestos significaban eliminar referencias raciales que ‘ahora’ podrían ser ofensivas. Cuando le preguntaron sobre esto por correo electrónico, Sherwood simplemente envió un comunicado público donde explicaban los detalles de su decisión.

En una entrevista reciente, la autora de la ahora famosa saga de James Bond habló sobre su experiencia al trabajar con la editorial. Dice haber tenido una cantidad increíble de apoyo y libertad en el proceso creativo. Está empezando a escribir el tercer libro, mientras que su segunda obra ya está lista para ser revisada y editada. Ella describe esto como un progreso similar a las películas de James Bond donde hay muchas personas leyendo y opinando juntas alrededor de una larga mesa.

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